IV Edición: Recursos energéticos & mineros

Sueña convertir RD en una nueva Dubái

Karim, quien fue candidato a la alcaldía de la capital en las elecciones pasadas, habla con mucha ilusión sobre su proyecto de visión de país, sobre todo del Gran Santo Domingo, el que señala transformaría los barrios vulnerables en urbes ricas, donde sus habitantes tendrán asegurado empleos con proyectos desarrollistas.

Ante la pregunta que de dónde saldrá el dinero para cambiar el rostro por uno igual a Dubái, explicó que varios empresarios se han interesado en invertir, maravillados por las riquezas naturales del país, incluyendo a uno que dice lo llevó a una reunión con el al jeque de Dubái, Mohamed Bin Rashid Al Maktum.

Aseguró que eso ocurrió cuando el pasado 29 de noviembre le explicó las riquezas de República Dominicana y le hizo entrega de un libro donde se muestran los principales recursos de la isla. El ámbar, larimar, las playas, ríos, la ganadería, la caña, tabaco y todo lo que opina hace de República Dominicana un paraíso.

“Karim no tiene miedo, porque lo imposible no existe”, expresó el empresario y aspirante político, de origen estadounidense, hijo de un árabe y una dominicana.

El principe Karim, como le conocen en las redes sociales, se autodefinió como el Donald Trump dominicano, por sus ideas desarrollistas y por sus aspiraciones presidenciales que afirma tener para las elecciones de 2020, para lo cual asegura observa propuestas de ocho partidos reconocidos ante la Junta Central Electoral.

Se considera un enamorado de la visión de Rashid Al Maktum de transformar un desierto, como era Dubái, con la voluntad de un grupo que creyó en él, “en una de las principales atracciones y que cuenta con tres de las diez maravillas arquitectónicas del mundo”.

Manifestó que uno de los principales atractivos con los que cuenta Dubái es La Palma, un grupo de islas artificiales, que es 5 mil 400 veces más grande que un campo de fútbol americano, tiene 35 mil habitaciones y se construye a un costo de 2.5 billones de dólares.

“Al ver de cerca lo que ocurrió en Dubái me inspiró en mi visión y cabe destacar que eso se logró en tan solo 20 años”, en un país que tiene 4 mil 113 km2, 12 veces más pequeño que República Dominicana y no cuenta con ningún recurso, ni agua ni petróleo”, sostuvo.

Para evitar caos

Abu Naba’a criticó a los partidos y sus dirigentes que durante más de 20 años se han aprovechado de las bonanzas y la tierra dominicana y que eliminando la corrupción se pueden usar mejores esos recursos para invertirlos en el bien de la población.

Karim cree que falta poco para que “nuestro país caiga en una situación caótica irreversible que nos convertiría en la nueva Venezuela, donde hay una crisis política, económica y social”.
“Tan solo con el 18% lo que el Gobierno tomó en préstamos desde el 2004 al 2012 hubiéramos construido tres maravillas del mundo en el país”.

“¿En qué beneficia esto?”, se preguntó para responderse que “tan solo en Dubái por las tiendas de las plazas comerciales anualmente pasan 54 millones de turistas”.

Asimismo, dijo que con el dinero que asegura se paga innecesariamente en el controversial contrato con la Cogentrix la República Dominicana hubiera construido obras de desarrollo y urbanísticas como las de Dubái.

“Este contrato fue firmado en 1997 y obliga al Estado dominicano a pagar seis millones de dólares al mes a una planta generadora que está apagada desde el mismo año de la firma, lo que es un contrasentido”, expresó al ser entrevistado en sus oficinas del sector Piantini.

“No ando de sacos y corbatas ni me expreso como el orador más fino de la escena, pero de algo estamos seguros, es que soy un ser humano real como el dominicano y como yo, que a pesar de haber nacido en circunstancias que le permiten olvidarse de los problemas del país”, señaló Karim, quien dice lucha por la población y arriesga su pellejo diciendo verdades e intentando despertar el pueblo.

Afirma que “estando en el exilio durante 20 meses viajé a 90 ciudades y me di cuenta de que nos estamos perdiendo de todo el potencial de este maravilloso país. Seguiré viajando a otras ciudades y mi plan es implementar de cada ciudad exitosa lo mejor en nuestra República Dominicana”.

Considera que uno de los mayores problemas que tiene el planeta tierra es que los idiotas no saben que son idiotas “y es hora de que las cosas cambien, es hora es hora de un país para todos”.

UN APUNTE

RD sí puede

Karim Aby Naba’a cree que si Dubái pudo, República Dominicana puede mucho más, ya que en ese país hasta los mosquitos son importados. Aseguró que “en nuestro país tenemos todos los recursos necesarios para convertirnos en la nueva metrópolis del mundo, pero nos falta el recurso más importante, nuestra gente. Dijo que no es político tradicional y no “necesita robar dinero del pueblo,