“El problema viene siendo ahora el acceso a los mercados. Hay muchos productos, el inconveniente que presentan en estos momentos (es el acceso a los mercados( y esto afecta mucho la actividad agropecuaria a nivel nacional ”, expresó el presidente del presidente de la Confederación Nacional de Productores Agropecuarios (Confenagro), Eric Rivero.

Ante la pandemia del COVID-19 muchos sectores han tenido que cerrar sus puertas como ha sido el caso de los hoteles del país.

“Nuestro sector compró, según el ministro de Agricultura Osmar Benìtez, unos 550 0 600 millones de dólares en comida el año pasado, que no se está vendiendo por la caída del sector turismo", dice.

Eric Rivero considera que el acceso a los mercados se está haciendo un poco complicado, ya que, por lo general, los restaurantes, hoteles y otros negocios tienen una gran demanda de productos agropecuarios, pero que por la situación actual los bienes no pueden ser colocados.

Otro hecho que agrava el problema es la decisión que han tomado alcaldes como el del Distrito Nacional, David Collado, y Abel Martínez, de Santiago, de limitar los horarios de los mercados de estas grandes ciudades. Explica que lo propio han hecho alcaldes de otros puntos del país. Esta decisión de las autoridades locales busca evitar la expansión del COVID-19.

Eric Rivero señala que el otro punto que está afectando al sector agropecuario es que muchos de los que estaban funcionando y que estaban recibiendo diferentes productos, ya han notificado a los productores que no van a seguir recibiendo por la baja demanda.

Afirma que otro el problema que se está agravando es que muchas de las empresas que están abiertas están notificando a los productores para que no les lleven productos, debido a que están obligadas a cerrar por la baja demanda que hay en estos momentos".

El también presidente de la Asociación Dominicana de Productores de Leche (Aproleche), Eric Rivero, dice que a pesar de que los productores agropecuarios tienen productos para abastecer el mercado dominicano, muchos de estos corren el riesgo de dañarse, situación que genera grandes pérdidas.

“El país cuenta con los productos necesarios para abastecer el mercado. Por ahora la cadena de distribución es la que tiene una limitación, como consecuencia de la situación que vive el país con el COVID-19 y muchos de estos productos corren el riesgo de perderse porque son productos que duran poco. En estos momentos estamos en plena cosecha de muchas frutas y las mismas que podrían perderse si no pueden llegar a los mercados ”, apunta el dirigente.

Mercado Nuevo de la avenida Duarte

Recientemente la Alcaldía del Distrito Nacional, conjuntamente con los ministerios de la Presidencia, Salud Pública, de Defensa, de Agricultura, Pro Consumidor y comerciantes, dijo que elaboraban un plan para la apertura este lunes del Mercado Nuevo de la avenida Duarte.

Los mercados del Distrito Nacional fueron intervenidos por las autoridades para ser higienizados y establecer un horario que les permita a los consumidores obtener sus productos de una manera segura ante la expansión de la pandemia COVID-19.

También, esto busca que los suplidores puedan vender sus productos, pero bajo estrictas medidas de higiene y seguridad para que no haya contagio del COVID-19.

En cambio, Manuel Matos, dirigente agropecuario de San Juan de la Maguana, dice que debe existir un plan para que los trabajadores del campo no sean apresados ​​cuando salgan de las fincas, argumentando que como uno de los desafíos del sector agropecuario es el tema agua, deben tener disponibilidad de este líquido en horas de la noche.

“El trabajador se queda a dormir en las fincas porque si sale es apresado. Muchas veces terminan temprano, pero que como hay toque de queda prefieren quedarse”, expresa el productor agropecuario.

Dice que San Juan de la Maguana está aportando yuca, maíz, habichuelas, hortalizas y otros productos al mercado dominicano.

En cuanto a la mano de obra en el campo dominicano, Matos indica que desde hace mucho tiempo el campo no cuenta con la mano de obra local, sino con el trabajo de nacionales haitianos.

“La mano de obra local en el sector agrícola prácticamente desapareció. Ahora la mano de obra que existe son de nacionales haitianos que solo están haciendo la labor de recolección de la cosecha”, expresó.