El Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep) consideró que estas medidas establecen la base para continuar aplanando la curva, mientras se mitiga el impacto económico y las libertades sociales en República Dominicana.

“Saludamos el reinicio de la actividad económica del país de manera oportuna y ordenada, manteniendo controlada la situación sanitaria a través de la minimización del contagio de la población vulnerable y el control y aislamiento de los contagiados, y la prevención constante con el resto de la población”, señaló el presidente del Conep, Pedro Brache.

Mientras el presidente de la Asociación de Industrias (AIRD), Celso Juan Marranzini respaldó la disminución del tiempo de toque de queda, así como la permanencia en sus hogares de los mayores de 60 años y de pacientes crónicos o con enfermedades de riesgo mientras dure el brote de coronavirus.

Precisó que en todos los sectores, sin excepción, la vuelta al trabajo irá acompañada de la aplicación de protocolos obligatorios de prevención. Dijo que las empresas socias de la AIRD ya los han definido y lo han aplicado aquellas que han estado operando.

Tanto el AIRD como el Conep respaldaron el acuerdo con el Banco Central, la Superintendencia de Bancos y la Asociación de Bancos Comerciales de la República Dominicana que permite la constitución de un Fondo de Garantías y Financiamiento para beneficiar a las micro y pequeñas empresas, el cual permitirá la canalización de decenas de miles de millones de pesos en préstamos a las micro y pequeñas empresas, tanto para refinanciar sus préstamos actuales en mejores condiciones.

Por otro lado, la Asociación Dominicana de Empresas de Inversión Extranjera (ASIEX) además de apoyar las medidas anunciadas por el Presidente, llamó a las personas, las empresas e industrias asumir con alta responsabilidad una nueva cultura sanitaria, de seguridad y protección, para continuar aplanando la curva, garantizar una cadena de actividades libres de contagios y prevenir la generación de una nueva ola de contagios por COVID-19.

Dijo que el reinicio de las actividades económicas y su viabilidad dependen ahora de la responsabilidad individual y de la vigilancia eficaz y oportuna del Estado.