Y es que han sido casi dos décadas en las que el sector público y privado han ido de la mano para avanzar en un negocio tan competitivo como es el turismo, que se ha convertido hoy en día en fundamental para el desarrollo y la economía dominicana, tal y como han reconocido todos sus actores en distintos foros.

No ha sido nada fácil llegar hasta aquí. Han hecho falta muchas ganas y mucha decisión a la hora de apostar por un destino que hoy puede competir con los mejores del mundo y en el que están presentes los grupos hoteleros más importantes del planeta.

En este camino, el papel del Gobierno dominicano ha sido clave. Su apuesta decidida por el turismo volcándose en la mejor de las infraestructuras, del entorno y de la calidad del producto, así como la seguridad jurídica, han propiciado la llegada de inversiones y de turistas que son lo que, en definitiva, le convierten en un lugar al que viajar, del disfrutar y al que  volver y las cifras desde hace años así lo atestiguan.

Hoy más que nunca, cuando el sueño del presidente Danilo Medina de llegar a los diez millones de turistas está a la vuelta de la esquina, es el momento de seguir aunando esfuerzos, de remar en la misma dirección y de tener muy presente que la competencia es cada vez mayor, por lo que es impredecible seguir luchando para que dominicana siga siendo uno de destinos más importantes del Caribe, tanto por sus bellezas naturales como por la calidad de su oferta, y el DATE es el mejor escaparate para mostrarle al mundo estas cualidades que le convierten en un lugar único.