Arturo Gómez, presidente y CEO de Eon Energy y fundador de Vowat, es una figura clave en la transición hacia energías renovables y la digitalización del mercado energético en México. Bajo su liderazgo, Eon Energy ha implementado una ambiciosa estrategia de inversión, destinando USD 500 millones anuales a proyectos de energías limpias. Esta iniciativa busca no solo reducir los costos energéticos, sino también cumplir con los objetivos globales de sostenibilidad a través de la implementación de tecnologías avanzadas como el Blockchain y la digitalización de los sistemas de energía.

 

Gómez, quien ha trabajado en el sector energético durante más de 20 años, ha sido un ferviente defensor de la adopción de tecnologías digitales en el ámbito energético. Con la plataforma Vowat, el primer marketplace energético de México, ha liderado un esfuerzo sin precedentes para brindar mayor transparencia en los precios del mercado energético. Esta plataforma permite a los grandes consumidores de energía negociar directamente con los generadores, eliminando intermediarios y mejorando la eficiencia del sistema.

Uno de los aspectos más destacados de la carrera de Gómez es su visión para el futuro del mercado energético. Según él, la clave del éxito reside en la combinación de energías renovables y digitalización. También ha señalado la importancia de utilizar la tecnología para integrar fuentes de energía renovable de manera eficiente y minimizar pérdidas energéticas. Su enfoque está en la descentralización de la energía, permitiendo que los usuarios tengan un mayor control sobre su consumo y puedan participar activamente en la generación y distribución de energía.

 

Además, Eon Energy ha priorizado la implementación de contratos electrónicos y el uso de sistemas de pago automatizados para facilitar transacciones más seguras y eficientes. Estas iniciativas no solo optimizan el mercado energético, sino que también promueven la adopción de energías limpias al reducir las barreras operativas y financieras para las empresas y consumidores.

Gómez se describe como un líder comprometido con la innovación y la sostenibilidad. Ha sido reconocido por su capacidad para anticipar las tendencias del mercado y adaptarse a las cambiantes demandas energéticas. Además, ha promovido iniciativas de responsabilidad social, buscando siempre el equilibrio entre el progreso económico y el cuidado del medioambiente.

Bajo su dirección, Eon Energy y Vowat están posicionadas como pioneras en la transformación del mercado energético en América Latina, con una clara apuesta por las energías renovables y la digitalización como motores de crecimiento. Gómez continúa impulsando nuevas inversiones y desarrollos tecnológicos que no solo beneficiarán a México, sino que también servirán como modelo para otras regiones en proceso de transición energética.

Los objetivos son que la energía no le cueste al Estado, ya que viene financiada por un sistema similar al de bonos de carbono, que es a través de las mismas empresas que hoy tienen las necesidades.

Actualmente, las empresas, por un plan que tienen a nivel mundial, están haciendo contrataciones para que tengan más energía renovable de la que se les está pidiendo por ley. El problema de esto es que lo hacen de una manera no unificada, lo que incrementa los costos y no se dirige directamente a nuevas inversiones en renovables. Lo que nosotros proponemos es usar estas inversiones directamente en renovables, donde se pueda canalizar y analizar, y que todo esto lo opere el Estado de acuerdo con las políticas que tiene para operar este 54% de energía. Por lo tanto, sería pura energía renovable, localizada solamente en zonas donde realmente se necesite, no en cualquier zona donde pueda haber un exceso de energía renovable. No pueden ser múltiples inversiones más pequeñas en zonas donde se está necesitando y donde tengan un impacto mayor.

El porcentaje de cuánta energía va a provenir dependerá mucho de la capacidad que haya para mezclar en México. Es cierto que la energía solar no puede sustituir al 100% la producción por otros tipos de fuentes debido al espectro en el que se genera. Sin embargo, si se apoyan con más inversiones en baterías, que actualmente son nulas debido a su alto costo, pero siempre que haya un acuerdo con el gobierno, se podrá canalizar y combinar con otros tipos de energías renovables. Entonces, podríamos llegar a un 100% de renovables que una todo el espectro nuevo de producción a partir del 2024 hasta el 2030. El avance que se pueda lograr frente a las demás fuentes dependerá realmente de las facilidades que ofrezca el gobierno, para dar incentivos que aceleren la producción de renovables y para que los permisos avancen más rápido que otros permisos.

El sentido de todos los mercados abiertos, donde se pueden conocer los precios tanto de los compradores como de los vendedores, es que agiliza las transacciones y también disminuye los costos de acuerdo con la oferta y la demanda. En todo momento encuentras más proveedores para lo que necesitas y sabes cuánto hay de cada producto. Hay estudios en otros países donde se ha visto que la corrupción se reduce con este tipo de proyectos. Entonces, lo que se busca es que todo esté en línea, para que todos tengan acceso a mejores precios y condiciones. Hoy en día, solo algunos permisionarios pueden hacerlo, cuando realmente quienes están obligados y tienen las necesidades de consumo son los usuarios finales, quienes actualmente no saben dónde comprar y siempre están obligados a comprar a través de un tercero, que puede opacar los precios verdaderos o las condiciones que existan.

Lo que vale la pena es que los usuarios, principalmente los más grandes, que son los que tienen mayores impactos en el mercado, puedan escoger sin depender de un tercero a la hora de comprar, solo a la hora de operar. El mercado debe estar operado, ya que es un mercado regulado, pero en el momento de la compra, los precios deben ser definidos por quien tiene las necesidades, que es el usuario final y el productor, no deben estar definidos por intermediarios como en el mercado mexicano, donde los suministradores solo deberían operar esta parte sin opacar los precios y obtener ganancias inmensas solo porque el comprador no conoce al generador. El sentido aquí es que el comprador pueda ir directamente con todos los generadores, analizar qué es lo que busca y obtener ese beneficio. De la misma manera, el generador, que ya ha hecho inversiones multimillonarias, puede tener el enlace y el contacto directo con quien le va a pagar, no con un intermediario que está inflando los precios.

Uno de los resultados más destacados está en analizar simplemente los precios del mercado Spot. El mercado abierto, el mercado Spot, el mercado diario que existe en todos los mercados del mundo, analiza toda la oferta y la demanda de todas las centrales que existen al mismo tiempo. Si observamos el precio del año pasado de la energía, que es público, y el precio promedio total de todo esto, más los precios que se usan para un consumo general, está por debajo en un 40% del precio público al que se vendió la energía a los usuarios finales, a los grandes usuarios. Para las casas, está a menos de la mitad del precio. Entonces, el beneficio es que tendrán un ahorro directo basado realmente en los costos del mercado, no en el costo inflado que les está dando un tercero, que no tiene mayor responsabilidad más que operar en el mercado, y que a veces lo puede operar de manera irregular.

Realmente toda la información es pública, el problema es que no está accesible para la gente. Entonces, no hay ningún problema con este tipo de cifrados. Para los cifrados de los datos personales de las empresas, ya existen proveedores de cloud como AWS, Azure y GCP, que tienen soporte nativo de estándares de encriptación y seguridad de datos. Por otro lado, los procesadores de pago implementan estándares de seguridad y protección de datos. Lo que hacemos nosotros, realmente, es tercerizar esto y utilizamos servicios de compañías que ya, en seguridad, mantienen los datos seguros de los usuarios. Es como hacer cualquier transacción bancaria.

Lo más importante es el uso de Blockchain, que es lo que permite mayor seguridad en las transacciones y un registro. Además, en México, la ley vigente exige que los contratos se firmen de manera electrónica y no física, bajo una nueva NOM vigente en México, lo que conocemos como la firma electrónica (FIEL). Esto da mayor seguridad porque se tiene información del momento de la firma, lugar y verificación de la persona que firmó. Por lo tanto, es muy importante.

Al momento de los pagos, usamos el sistema de un tercero que está operado por el Banco de México. Esto permite que los pagos los realice directamente el comprador al vendedor sin que tengamos que autorizar o pasar por esta parte. Lo usamos de la misma manera que el Banco de México traza sus transacciones, a través de este sistema de pagos y transferencias.

Yo creo que es el futuro realmente del financiamiento de proyectos, pero ya existe. En realidad, es como el mercado accionario, como la bolsa de valores o como un crowdfunding, funciona de la misma manera. La diferencia es que en este esquema, los bonos o los créditos que se utilizan son monedas, que realmente son algoritmos que existen en el mercado. Lo que sí se necesita es mayor regulación y mayor uso.

Lo que estamos pensando, hacia dónde va esto, es que tal vez la misma bolsa de valores u otro tipo de regulador sea quien visualice y permita quiénes van a ofertar, es decir, por qué producto se va a ofertar, porque uno de los problemas que ha existido es que no hay nada tangible. Lo que nosotros estamos planeando justamente es que todas estas ofertas se vayan a un activo que sea tangible, a una central eléctrica que exista, que tenga cierto tamaño y que funcione de la misma manera que el levantamiento de capital, por medio de fondos de inversión. Lo que proponemos es que haya este reglamento y sabemos que ya se puede hacer. Lo más importante es que el comprador pueda tener acceso a visualizar todas las condiciones del proyecto.

Lo más importante es que cada persona, sin ser una empresa, pueda tener control de su consumo y de sus horarios. Entender por qué algunos horarios son más caros y aprovechar algunas ofertas. Ya existen en el mercado algunas opciones donde se puede ahorrar. Ahí es a donde debemos llegar, y también es muy importante que pudiéramos usar el conocimiento de en qué momentos se produce de más en caso de que tengamos algún tipo de generación local, oa en qué momentos no vamos a estar (podría ser porque estamos de vacaciones) y notificar al mismo sistema, para que se vuelva más inteligente y, como no se va a usar (pues ya fue notificado), dirigir la energía a otro lugar. De esta manera, se puede ahorrar tanto al Estado como a las personas, que son quienes terminan pagando todos estos costos.

Lo importante es empezar a crear un mercado abierto, entre cualquier tipo de usuario, donde puedan ceder sus derechos, cobrar o negociar entre ellos a través del operador del sistema. Ellos pueden ceder sus derechos de energía o cobranza para tener un mercado más inteligente. Esto ya existe y se puede utilizar a través de Blockchain. Sin embargo, cualquier mercado del mundo necesita estar más abierto, porque la gente necesita tener más conocimiento de cómo funciona. Eso es lo que nosotros buscamos mostrar, que sea más accesible a través de la plataforma, para que puedan entender de manera sencilla cuándo les conviene o cuándo no, si puede haber un riesgo o si puede haber alguna necesidad extra, y que solo puedan buscar la cantidad de energía o dinero que exista en el mercado, y que ellos puedan acceder a esto. Es como empezar a hacer un sistema de trueque, pero solo se puede llegar a esto cuando se entiende. Esto va a hacer que las emisiones disminuyan mucho, porque habrá muchas menos pérdidas de energía y, además, podremos usar con mayor inteligencia la energía renovable, ya que podemos predecir de manera más adecuada el consumo con la generación.