Según los datos de la Universidad Johns Hopkins, Estados Unidos y Brasil están dentro del grupo de países que ya aglutinan un 40 % de los casos positivos del patógeno causante de la COVID-19 a nivel global, mientras que en el ránking de países más afectados también se encuentran otros como México, Perú y Chile, que entre los tres contabilizan 793.345 positivos y 43.199 fallecimientos.

Colombia, que pasó desde el miércoles a integrar la lista de los 100.000 o más casos de coronavirus, es el vigésimo país con más contagios, con 102.261, y tiene una tasa de infección de 1.922,96 casos por millón de habitantes, con 3.344 decesos.

En este país sudamericano la dicotomía entre el cuidado de la salud y el despertar de la economía tendrá otra fotografía este viernes, en el segundo “Día Sin IVA” del año.

Con el fin de evitar aglomeraciones como en la anterior jornada, el Gobierno colombiano dictaminó que las ventas de electrodomésticos y ordenadores solo se llevaran a cabo por internet.

Estados Unidos, que rompió este jueves su récord diario de contagios con 54.437, superando por primera vez los 50.000, elevó el total de casos a 2.732.639 y ve cómo algunas de sus regiones tienen que operar con freno de mano a la hora de abrir la economía ante el impacto del virus.

En California, su gobernador, Gavin Newsom, anunció detalles de las nuevas restricciones en espacios cerrados, incluidos bares y cines, en 19 condados.

“Antes de las vacaciones del 4 de julio tenemos que incidir en la importancia de llevar máscara y seguir los mandatos de distancia social, especialmente en los condados con playas. No queremos ver un nuevo aumento dentro dos o tres semanas”, señaló el político demócrata.

Arizona ha cerrado piscinas, bares, gimnasios y cines, por el aumento de los casos y después de que en mayo el presidente estadounidense, Donald Trump, alabara el inicio de la reapertura económica.

Colorado y Michigan se han retractado de sus planes de apertura de bares, pese a que en muchos condados se habían puesto las vacaciones del Día de la Independencia como hito para alcanzar la “nueva normalidad”.

En Florida, donde solo este jueves se registraron más de 10.000 casos del SARS-CoV-2, el vicepresidente de EE.UU., Mike Pence, calificó de “innovadora” la respuesta del gobernador republicano Ron DeSantis a la pandemia, pese a los sucesivos récords de infecciones diarias.

DeSantis, alineado con el presidente Donald Trump e impulsor de la apertura económica floridana en plena ola creciente de positivos de la COVID-19, insistió en que el aumento obedece a más jóvenes infectados e hizo un llamamiento a los mayores de 65 años a estar alejados de las multitudes y minimizar los contactos personales fuera de casa.