Manifestó que esta medida, conjuntamente con otras que ejecutará la Dirección General de Aduanas, protegerá a los consumidores de posibles engaños que se producen cuando se importan vehículos declarados pérdida total y con el guía movido de la derecha a la izquierda para violar las disposiciones legales que lo prohíben.

Indicó que los vehículos con el sistema de control de emisiones de gases contaminantes inservible o eliminado, con las gomas desgastadas, y con el odómetro alterado, afectan directamente la seguridad, el costo de las reparaciones, el nivel de contaminación y la durabilidad de las unidades adquiridas usadas.

El representante de ACOFAVE aplaudió que las autoridades nacionales han concentrado en un organismo técnico capacitado y con espíritu de trabajo, las distintas disposiciones, medidas, reglamentaciones y fiscalizaciones que previo a la publicación de la Ley 63-17 se encontraban dispersas entre diferentes entidades gubernamentales muchas de las cuales terminaban siendo inoperantes.

Subrayó también la importancia de que las autoridades hayan establecido la correlación directa entre la edad y la condición del parque vehicular y los niveles de muertes, invalidez y heridas de gravedad que se producen.

Explicó que adicionalmente a los choques y accidentes, los vehículos obsoletos y en mal estado contaminan desproporcionadamente el medio ambiente y generan gastos adicionales de salud que los habitantes y el propio estado deben de asumir para remediar enfermedades respiratorias, las heridas y roturas de huesos que producen los accidentes.

El presidente ejecutivo de ACOFAVE aclaró que el segmento de los vehículos pesados es el que con mayor urgencia debe ser fiscalizado y revisado por las autoridades, por la grave y alta incidencia de accidentes que se reportan de camiones y autobuses a los que “se les fueron los frenos” y terminan produciendo numerosas muertes, heridas y lesiones permanentes.