Mujeres Factor de Éxito

PEDRO BRACHE presidente del Conep: La clave del éxito: aumentar los niveles de productividad y ser más competitivos.”

En esta oportunidad, donde el escenario presenta todos los elementos para hacer de la República Dominicana un país más competitivo, presentamos en nuestra portada al empresario Pedro Brache, presidente ejecutivo corporativo del Grupo Rica y presidente del Conep, institución empresarial que lidera el fortalecimiento del sector productivo nacional para que este sea más competitivo y sostenible. Brache es un empresario de éxito que, apegado a sus principios y valores, aporta al desarrollo y crecimiento de otros, a través de la coherencia de su actuación y el permanente compartir de su visión sobre como alcanzar el éxito, y que consiste en:

1) trazarse metas,

2) ser constante en el deseo de alcanzar propósitos de vida,

3) trabajar arduamente, día a día con esfuerzo,

4) estudiar constantemente y

5) mantener relaciones honestas y responsables.

En palabras del presidente del Conep, compartiremos su visión de la República Dominicana competitiva y del liderazgo necesario para lograrlo, ese que permitirá continuar trabajando por hacer, de esta hermosa nación, un lugar próspero, productivo y más competitivo, de cara a los nuevos retos que el ambiente global nos impone.

¿Qué estrategias son necesarias para lograr el triunfo de las instituciones y organizaciones bajo su liderazgo?

P.B.: “Soy creyente de que las compañías crecen por medio del desarrollo de su gente, y considero que el capital humano es fundamental para que las empresas y la economía de un país marchen en armonía. Tanto en las empresas, como en las instituciones en las que me ha tocado trabajar, he sido promotor de que a todos los colaboradores se les dé la oportunidad de desarrollar sus talentos, de que se labore en un ambiente de respeto, armonía e integración, pues definitivamente una empresa es una familia. Otro pilar que para mí es de suma importancia es la transparencia y la unión, como directivo, uno debe devolver la confianza a los colaboradores, miembros o clientes, demostrando una ejecución transparente y manteniendo a todo el mundo integrado, que participen y se sientan parte de cada acción que se realiza”.

¿Cuál es su objetivo central como presidente del Conep?

P.B.: “La misión principal del Conep es liderar el fortalecimiento del sistema de libre empresa, participando activamente como agente de cambio y transformación, en la consolidación de la democracia y sus instituciones para promover el desarrollo económico y social de la nación dominicana. Mi rol al frente del equipo líder del empresariado privado dominicano es dar continuidad a la agenda del Conep y a las acciones que ya están establecidas en la agenda empresarial, esas que van en consonancia con la Estrategia Nacional de Desarrollo y la VIII Convención Empresarial. En este sentido, mi objetivo es aportar al avance en estos temas y a la solución de los problemas que enfrenta el país y que atentan contra la productividad, la libre empresa y la competitividad, siempre enfocados en el bienestar y el desarrollo de los ciudadanos.”

¿Qué papel juega el Conep en el presente y futuro de la República Dominicana?

P.B.: “El Conep incorpora a las principales organizaciones empresariales sectoriales, y a las empresas de mayor incidencia en la economía nacional, además, es el principal órgano interlocutor con el Estado en la definición de políticas públicas del ámbito económico y social. Somos un actor clave en las decisiones que tome el país en la actualidad, y para dar continuidad a la agenda de desarrollo sostenible y la Estrategia Nacional de Desarrollo, ambas son estrategias determinantes para los próximos años. En nuestras manos descansa en gran medida la productividad y la generación de riqueza, por lo cual y junto al Estado, tenemos la gran responsabilidad de trazar las líneas del rumbo del país desde hoy y hacia el futuro. Nuestro gremio juega un papel de gran importancia, pues las empresas mueven más de la mitad de la economía del país, y el Conep que las alberga, tiene el firme interés de que la República Dominicana alcance un mayor nivel de desarrollo competitivo y sostenible”

¿Cómo se adapta República Dominicana a un mundo tan rápidamente cambiante?

P.B.: “Sin lugar a duda, nos encontramos en un contexto global marcado por nuevas tendencias, donde todo es rápido y cambiante, donde todo es digital y los robots están sustituyendo la mano de obra en importantes procesos de producción. Vivimos la 4ta. Revolución Industrial, por lo que es necesario desarrollar una agenda público-privada con acciones tendentes a trabajar de manera conjunta, para que el país aproveche los cambios que se están dando en el escenario global y pueda ser más competitivo. Como puntos clave consideramos que se deben tomar en cuenta:

• La educación: como pilar clave que nos permita formar y preparar capital humano que deberá liderar los procesos de cambio dentro de los procesos de las empresas y mover la productividad del país.

• Investigación y desarrollo: para aumentar nuestra capacidad para producir y ofertar bienes y servicios, mejorar procesos, explorar oportunidades de negocios y nuevos mercados, así como fortalecer la inteligencia comercial.

• Innovación y emprendimiento: para aprovechar aún más a nuestros talentos, la posibilidad de desarrollar nuevas ideas, generar patentes e ir adaptando nuestro modelo de producción a la industria 4.0.

Estamos llamados a dar un salto cualitativo, y definir claramente hacia dónde queremos ir. El mundo ha marcado un nuevo ritmo y quedarnos fuera, no es una opción.

¿Cuáles deben ser las prioridades del gobierno a nivel de inversión en pro de la evolución del país?

P.B.: “Una de las prioridades de inversión debe ser la educación como principal pilar para lograr un mayor desarrollo, pero una educación de calidad, desde la inicial hasta el nivel superior, una que esté acorde con las exigencias de los nuevos tiempos y que permita lograr un capital humano con las competencias y calificaciones que demanda el mercado laboral actual y futuro. Por otra parte, las exportaciones, puesto que tenemos mucho potencial, pero nos hace falta mejorar las estrategias para lograr exportar productos de calidad mundial que compitan con otros países. Esto puede lograrse si se trabaja desde la mejora en los procesos y tecnologías de producción, hasta la capacidad de gestión de los espacios y mercados internacionales. Por último, logística y conectividad, son otras de las áreas claves si queremos convertirnos en el Hub del Caribe, así que aún hay temas por trabajar para que tengamos toda la capacidad que necesitamos. Para todo esto se necesita capital humano, infraestructura y estrategias”.

¿Cómo alcanzar el equilibrio entre el trabajo del sector público y la empresa privada?

P.B.: “El diálogo abierto y transparente es la base de todo. El sector empresarial es, y siempre será, un aliado del gobierno y de todos los sectores de la vida nacional para buscar soluciones a los problemas que enfrenta el país. Nosotros trabajamos, y continuaremos haciéndolo, en la mejor disposición por ir de la mano con el sector público a través de las diferentes instituciones y órganos competentes, en todos los trabajos y planes que sean necesarios para que el país pueda seguir creciendo y avanzando. Cada vez se hace más evidente y necesaria, la consolidación de las alianzas público-privadas que permitan unir esfuerzos de estos dos sectores, así como de la visión y los recursos para tomar decisiones responsables y definitivas ante los temas de la agenda nacional”.

¿Cómo visualiza los retos actuales del país?

P.B.: “Si hablamos de retos, debemos decir que es necesario continuar trabajando, seguir mejorando y aumentando nuestro crecimiento. Hay unas reformas estructurales que son clave para que podamos continuar avanzando y están pendientes según lo establecido en la Estrategia Nacional de Desarrollo; Con la culminación del Pacto Eléctrico se deberán iniciar importantes transformaciones dentro del sector a nivel institucional y de operaciones, y esto traerá consigo una transición en seis años a una tarifa técnica, y un plan de reducción de pérdidas en distribución que llevaría las mismas de un 32% a un 15%, esto contribuiría de forma positiva, directamente en la economía. Estamos hablando que tenemos la responsabilidad, junto a los demás actores, de dar cumplimiento a los acuerdos de este Pacto para que logremos un sistema energético confiable, competitivo, financiero y ambientalmente sostenible y eficiente, los siete días de la semana para todos”

“Por otra parte tenemos que, en su momento, se convocará al Pacto iscal, el cual debe ser el resultado de un análisis profundo de nuestro sistema impositivo actual, entretanto, es importante evitar la creación de nuevos gravámenes, sobre todo si afectan la economía de nuestros ciudadanos y, en este mismo orden, es necesario el diseño de un sistema tributario que, de manera estratégica, promueva el desarrollo y crecimiento de los sectores con mayor potencial competitivo. Todos estamos de acuerdo en combatir la informalidad y la evasión, sin embargo, esto debe ocurrir al mismo tiempo que exista un régimen recaudatorio más favorable que pueda traer más inversión segura para la nación”.

¿Cuáles son las potencialidades de República Dominicana?

P.B.: “La República Dominicana ha logrado un gran desarrollo económico en la región, y su principal potencialidad, es que tiene recursos y sectores con grandes oportunidades de crecimiento, lo que indica que puede continuar avanzando y desarrollándose. Tenemos un sector turístico con una gran y diversa oferta que abarca desde playas, hasta ecoturismo y montañas, además, se ha ido expandiendo al turismo de salud. A nivel agrícola, continuamos posicionados con productos de renombre mundial producidos en nuestras tierras, que han puesto en alto nuestro nombre y nos destacan como marca país. Contamos con diversos y cuantiosos yacimientos mineros localizados en distintas zonas del país, así como tenemos uno de los depósitos de oro más grandes de América. Este es un sector que todavía tiene mucho potencial para continuar creciendo”.

¿Qué tan relevante es la inversión extranjera para el desarrollo del país?

P.B.: “La inversión extranjera tiene un gran valor para el país y reconoce el potencial que tenemos en cuanto a recursos y posición geoestratégica en la región. Si queremos convertirnos en un Hub del Caribe, nuestra estrategia debe incluirla. Esto nos permite seguir posicionando al país y generar más empleos, lo que significa riqueza y bienestar, además, nos abre las puertas a nuevos mercados e intercambios comerciales. Es importante que sigamos trabajando en mejorar aquellos temas que nos permitan tener un buen clima de inversión y seguridad jurídica, así como aprovechar los acuerdos comerciales que ya hemos suscrito y evaluar otros posibles”.

¿Cuáles son las bases fundamentales de un modelo económico exitoso en R.D.?

P.B.: “Nos encontramos en un momento crucial de nuestra historia, un mundo que está viviendo un cambio de era. Si bien es cierto que debemos avanzar en las tareas que se han trazado a través de la Estrategia Nacional de Desarrollo, y mantener la discusión de temas clave en la mesa del diálogo con todos los actores y sectores, también debemos repensar el modelo actual. Debemos volcarnos a una estrategia enfocada en actividades que generen divisas a la economía. La atracción de inversión extranjera, las exportaciones a través de la innovación en términos de tecnología y productividad en la industria y el sector agropecuario local, el turismo y las zonas francas. Que se fomente y se generen las condiciones para tener una mayor iniciativa privada, libertad de competencia y seguridad jurídica. Es necesario trabajar bajo una alianza entre el gobierno, el sector privado, la sociedad civil y la academia, reconociendo que cada uno tiene roles distintos, pero enfocados en objetivos comunes”.

Pero ¿cómo incrementar la productividad de la República Dominicana?

P.B.: “La productividad se incrementa, primero, eliminando las cargas impositivas que están limitando el crecimiento de muchas MiPymes y que generan informalidad y competencia desleal en distintos sectores. Necesitamos generar las condiciones para que, tener una empresa, no represente un costo tan alto. Así mismo, debemos concluir la reforma del Código Laboral, esto, para que tengamos una legislación acorde con los nuevos tiempos que permita tener relaciones más armoniosas entre líderes y colaboradores. Por supuesto, el tema de la productividad también se ve impactado por temas como el costo de la energía eléctrica, un tema que podría pasar a ser un tema del pasado con la firma del Pacto Eléctrico y procurar lograr un sistema de transporte eficiente y menos costoso”.

Ahora bien, en un país más productivo, ¿cómo crear mayores oportunidades para la población más necesitada?

P.B.: “Es parte de nuestra razón de ser, poder generar empleos y oportunidades de desarrollo para todos los dominicanos. El sector privado de la República Dominicana está consciente que no hay forma de tener rentabilidad, ni crecimiento, si no trabajamos en pro del desarrollo de nuestros colaboradores, clientes, comunidades y el país entero. Cada vez aumenta el número de empresas que además de los múltiples beneficios que ofrece a sus colaboradores, desarrolla programas de Responsabilidad Social Empresarial, aportando así a la solución de problemas de comunidades, zonas donde opera y en la atención a grupos vulnerables. El Conep promueve la importancia de contar con políticas internas y programas con la comunidad, que permitan a las empresas desarrollar gestiones socialmente responsables que impacten de manera positiva en la vida de los dominicanos”

¿Ve con optimismo el reto del empresario dominicano?

P.B.: “El Conep tiene muy claro que sus acciones deben encaminarse hacia el objetivo de más productividad y competitividad para República Dominicana. Hemos reiterado nuestro compromiso e interés por continuar trabajando de la mano y buscando consensos con los diferentes sectores para que podamos dar el giro que necesita nuestra economía, impulsar las transformaciones sociales que nos hagan avanzar como país y seguir construyendo un país más justo y con bienestar para la mayoría, donde se sigan respetando los derechos de todos por igual y donde haya más seguridad. Una mejor República Dominicana depende de una visión compartida y de un esfuerzo colectivo de todos nosotros”

                   

 

                                                                                                                                                                   

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