Norwegian Cruise Line Holdings anunció el pedido más completo en su historia, con un total de ocho buques de última generación y la construcción de un muelle multibuque en Great Stirrup Cay, la isla privada de destino de la compañía en Bahamas y su puerto de recalada en el Caribe mejor valorado.

Este plan abarca una década y tiene como objetivo mejorar la oferta de productos, las experiencias de los huéspedes y la infraestructura operativa, respaldando la posición del holding  de cruceros en cuanto a sus ofertas vacacionales.

La entrega de los nuevos buques para las tres divisiones del holding se llevará a cabo en un periodo de diez años, entre 2026 y 2036. Para Norwegian Cruise Line, se espera la recepción de cuatro buques de aproximadamente 200.000 toneladas de arqueo bruto, cada uno con capacidad para casi 5.000 cruceristas, en los años 2030, 2032, 2034 y 2036. Oceania Cruises tiene prevista la entrega de dos naves de 86.000 toneladas de arqueo bruto, cada una con capacidad para 1.450 cruceristas, en 2027 y 2029. Por último, Regent Seven Seas Cruises recibirá dos buques de 77.000 toneladas de arqueo bruto, cada uno con capacidad para 850 cruceristas, en 2026 y 2029.

Harry Sommer, presidente y director ejecutivo de Norwegian Cruise Line Holdings, destacó la importancia estratégica de esta orden , que fortalecerá el crecimiento a largo plazo del holding y permitirá mejorar la eficiencia de la flota. 

Muelle caribeño 

También se anunció la construcción de un nuevo muelle en Great Stirrup Cay, Bahamas, para apoyar la mayor capacidad en el Caribe y mejorar la experiencia de los huéspedes. La construcción del mismo está programada para el verano de 2024 y se espera que concluya a finales de 2025, con una inversión de aproximadamente US$150 millones. Este nuevo muelle permitirá dar cabida simultáneamente a dos grandes buques de las clases actuales y futuras del holding, mejorando así el acceso a la isla privada durante todo el año.