La filial brasileña de la aerolínea Latam, la mayor de América Latina, informó este jueves (09.07.2020) de que se acogerá a la ley de quiebras de Estados Unidos en un proceso voluntario de reorganización y reestructuración de deuda debido a la “prolongación” de la pandemia del coronavirus. Pero advierte que seguirá operando “normalmente”.

La decisión se produce semanas después de que el pasado 26 de mayo Latam, a través de sus filiales en Chile, Perú, Colombia, Ecuador y Estados Unidos, se acogiera al Capítulo 11 de la ley estadounidense de quiebras en medio del “impacto sin precedentes” de la crisis provocada por la COVID-19. Latam se convierte así en la segunda aerolínea en América Latina en buscar refugio bajo la ley de bancarrota de Estados Unidos, después de Avianca Holdings.

“Hoy, 9 de julio, LATAM Airlines Brasil también forma parte de este proceso de reorganización voluntario como un movimiento natural ante la prolongación de la pandemia del coronavirus”, expresó en un comunicado el presidente de la aerolínea en Brasil, Jerome Cadier.

La empresa explicó que la medida le permitirá tener acceso a nuevas fuentes de financiación, “trabajar” con los acreedores y otras partes interesadas para la reducción de su deuda y “abordar los desafíos comerciales” que enfrenta. “Estamos seguros de que la integración al Capítulo 11 es la mejor opción para que Latam Airlines Brasil tenga acceso a nuevas fuentes de liquidez, fortaleciendo su posición de liderazgo en la industria aérea”, subrayó.

Agregó que el proceso de reorganización financiera de Estados Unidos es “diferente del concepto de reorganización en otros países” y no se trata de un procedimiento de liquidación, sino parecido a la recuperación judicial en Brasil y sirve para evitar la bancarrota de una empresa en dificultades financieras. Sin embargo, la ley estadounidense tiene algunas ventajas sobre la ley brasileña, que fueron decisivas para que Latam eligiera este modelo.

Latam Brasil aseguró que seguirá “operando según lo permitan las prohibiciones de viajes y la demanda”, así como pagando a los empleados y proveedores y cumpliendo “con las obligaciones de beneficios”.

La compañía, que venía manteniendo conversaciones con el Gobierno del país para buscar apoyo financiero, también informó de que “continúa avanzando” con las negociaciones del banco de fomento brasileño (BNDES) para obtener una línea de crédito.